Respiración bucal
Si tu niño respira por la boca normalmente CUIDADO!!…esto genera un impacto negativo en el desarrollo estético de su cara y en la posición de sus dientes; además de generar enfermedades crónicas de la garganta e inflamación de las encías.
El hombre nace condicionado para respirar por la nariz y alimentarse por la boca. Al romperse ese mecanismo fisiológico se afecta el crecimiento y desarrollo, no sólo facial, sino general. La respiración bucal se considera normal sólo cuando se realiza bajo esfuerzos físicos muy grandes.
Muchos pacientes en edades temparanas no desarrollan un adecuado tamaño del maxilar superior por mala posición de la lengua y esta situación es de fácil prevención y tratamiento con ortopedia maxilar, que consisten en ampliar, a través de sencillos aparatitos, el tamaño de los maxilares.
Algunos de los efectos de la respiración bucal consisten en la introducción de aire frío, seco y cargado de polvo en la boca y la faringe, lo cual:
- Afecta las funciones de calentamiento, humedificación y filtrado del aire que entra por la nariz
- Incrementa la irritación de la mucosa faríngea
- Disminuye la cantidad de oxígeno que pasa a la sangre
- Genera ligera anemia, hipoglobulinemia y ligera leucocitosis
- Disminuye la expansión normal de sus pulmones
- Déficit de peso y a menudo, tórax aplanado
- En el aparato circulatorio se presentan trastornos funcionales como palpitaciones o soplos
- Disminución de la capacidad intelectual por la baja oxigenación
- Alteración de la audición, el olfato y el gusto
- Adenoiditis y faringitis agudas o crónicas.
Si alguno de tus seres queridos tiene algunos de estos hábitos es importante contactar a un especialista para la valoración y solución del problema.
